Actúa Córdoba se define como «una escuela de cine y de teatro para todos». Quieren transmitir su amor por estas disciplinas a sus alumnos, para que disfruten de un ambiente de creatividad, colaboración y trabajo. Se pretende formar un grupo de personas amantes del cine, del teatro, de los personajes, de las historias; compartir ideas, hacer obras de teatro ante el público, exhibir cortometrajes.

“Yo la única intención que tenía era dar cine a nivel teórico pero la gente quería rodar, este proyecto empezó a crecer y fundamos Actúa Córdoba”, cuenta Francisco ‘Chico’ Sánchez, fundador de Actúa Córdoba.

Sala de doblaje de la escuela Actúa Córdoba. Foto: Miguel Valverde

Actúa Córdoba nace con el sueño de ‘Chico’ Sánchez de democratizar el cine y el teatro y hacerlo accesible a todo el mundo. El teatro es más sencillo de acceder, pero es verdad que el cine está reservado al concepto de élite. En Córdoba no había ninguna opción de acercarte a estudiar guion, cámara o hacer cortometrajes, y nace con la idea de que todo el mundo pueda tener acceso al cine”, comenta Gonzalo Moya, director de Actúa Córdoba.

El origen del cine

El origen formal del cine se remonta al siglo XIX, con la invención de la fotografía. Con ella se dieron los primeros pasos hacia la generación de la impresión del movimiento, gracias a la persistencia retiniana (la mínima perduración de las imágenes vistas en la retina humana cuando se proyectan a gran velocidad) y al principio de la cámara oscura.

La primera proyección fílmica exhibida al público tuvo lugar en París el 28 de diciembre de 1895. Consistía en una proyección de la salida de unos obreros de una fábrica en Lyon. Fue grabada por los hermanos Lumière, quienes en un año produjeron más de 500 películas de no más de un minuto de duración.

Una de las salas de Actúa Córdoba. Foto: Miguel Valverde

A esa primera proyección acudieron apenas 35 personas, pero la voz se corrió muy rápidamente en París y pronto hubo multitudes deseosas de ver el nuevo invento, anunciado como Cinématographe Lumière.

También es famosa la anécdota de que una de sus primeras proyecciones involucró la filmación frontal de un tren que llegaba a la estación. El público asistente, temeroso de que el tren los atropellara, huía de la sala.

Formar jóvenes artistas

La escuela tiene una amplia oferta de formación y servicios. Desde teatro para los más pequeños, para que desde muy temprana edad desarrollen los valores y aptitudes que el teatro aporta, hasta teatro matinal para seniors, porque cualquier edad es buena para disfrutar del teatro. También tienen cursos de director de fotografía, director de cine, doblaje, ponerte delante de una cámara o escribir tus propios guiones.

“La escuela tiene doble objetivo. Primero formar esa cantera de actores, realizadores y guionistas. Y apoyar la producción interna y externa de la escuela. Hemos estrenado una película en cartelera, Godot. Queremos sacarla en plataformas como Amazon, y que la escuela sea la punta de lanza para otros proyectos profesionales en la ciudad y en un marco de diez años intentar que Córdoba sea un lugar de producción”, comenta Chico.

Francisco ‘Chico’ Sánchez, fundador de la escuela Actúa Córdoba. Foto: Miguel Valverde

“Se está formando una cantera excelente gracias a ‘Chico Sánchez’, muchos alumnos están creando sus propias productoras y hay muchas películas que están saliendo a nivel comercial. Todo ello tiene que ver con las clases que ha impartido ‘Chico’. Es verdad que está dando sus primeros pasos y aún quedan otros cinco o diez años para que esta cantera crezca y consigamos que se quede, eso es fundamental», dice Gonzalo.

Apoyo de las instituciones al cine

En el preámbulo de la Ley del cine se define a esta manifestación artística como un “elemento básico de la entidad cultural de un país. Su contribución al avance tecnológico, al desarrollo económico y a la creación de empleo, junto a su aportación al mantenimiento de la diversidad cultural, son elementos suficientes para que el Estado establezca las medidas necesarias para su fomento y promoción”.

La ley establece distintos tipos de ayudas estatales, de las cuales dos son para la producción de cortometrajes, otra para la participación en festivales internacionales y otra para su distribución. Las restantes son a las que se dedican las partidas más cuantiosas y están enfocadas a la producción de largometrajes. Además, los proyectos pueden optar a ayudas autonómicas o locales que tratan de promover los rodajes en sus territorios.

«Nosotros reivindicamos un apoyo más decidido de las instituciones aunque se están dando pequeños pasos en ese camino y sobre todo buscando la sinergia entre la empresa privada y las instituciones que le abran el camino a las empresas. Lo bueno que tiene Córdoba es que está bien conectada aunque seguimos siendo un páramo cultural en cine, y por eso nace Actúa Córdoba. Hacer una cantera para poder generar una industria en Córdoba de cine”, comenta ‘Chico’.

Francisco ‘Chico’ Sánchez, fundador de la escuela Actúa Córdoba. Foto: Miguel Valverde

Hay una falsa creencia de que el cine es accesible para todos, y que con una cámara se te abren todos los caminos. El cine sigue siendo una industria cara y clasista en España. Sigue moviéndose por grandes familias. Es verdad que todo el mundo puede practicarlo, pero ese acceso a las primeras ligas está muy alejado de una escuela como la nuestra. De ahí a lo que sucede en Madrid, gente que va a los Goya o a Cannes. No hay algo intermedio, hay un salto muy grande entre el primer mundo del cine y en el que nosotros trabajamos”, finaliza Gonzalo.

Álvaro Castilla/Fotos: Miguel Valverde