Antonio Torcuato, presidente de COMACOR y Manuel Maya, padre del vendedor fallecido, «reivindican un trato justo por parte del ayuntamiento y una solución rápida ante la extinción de la licencia de la familia afectada». Seis meses después de las últimas movilizaciones la situación está en el mismo punto: no ha habido cambios, ni en los técnicos, ni en las ordenanzas, ni en el convenio. A lo que se le suma la difícil situación que está sufriendo la familia de uno de los vendedores ambulantes.