Fue Fernando 3º EL SANTO quien hacia el siglo XIII en plena conquista del Guadalquivir mandó construir un hospital de campaña que más tarde se convertiría en la ermita del Santísimo Cristo de los Desamparados de Pedro Abad, que hoy en día da nombre y ubicación a esta bella localidad del Alto Guadalquivir.
Esta villa mayoritariamente agrícola es hoy en día un pueblo que sabe velar por sus tradiciones y mantener sus raíces culturales y gastronómicas de generación en generación.
Avanzamos rio arriba mientras sus bellas casas encaladas se van haciendo más pequeñas y el verde de sus campo se extiende a nuestra vista, recordar su tradicional y riquísima gastronomía, su estupendo museo y el trato recibido en esta villa de milagros nos dejan ir en paz sabiendo que viajar a Pedro Abad y disfrutar es lo mismo.