Una nueva ola de diseñadores está convirtiendo la moda cordobesa en un referente nacional e incluso fuera de nuestras fronteras.
Aún reverbera el eco de los aplausos que recibió Palomo Spain por el look con que vistió a la cantante Beyoncé el día en que presentó a sus mellizos El de Posadas se codea ya con flor y nata del star system patrio e internacional. Y la mismísima Rosalía se muere por sus diseños fluidos, etéreos, como salidos de un cuadro de El Greco.


Otro de los nombres más conocido es el de Juana Martín, que en más de una ocasión ha puesto en pie y a bailar flamenco a los grandes popes de la industria en la Semana de la Moda de París.
La cordobesa presentaba anoche en los jardines del Alcázar de los Reyes Cristianos su última colección flamenca, ‘Veintitres.01’
Celebrities como Águeda López, esposa de Luis Fonsi, y Rosanna Zanetti son dos de las incondiconales a sus volúmenes arquitectónico y el movimiento de sus creaciones


La nómina de creadores la amplía Andrew Pocrid, que se convirtió recientemente en la sensación de la última Gala de los Goya gracias a Paula Echevarría. La actriz se decantó por un diseño de Pocrid elegante y atemporal al más puro estilo de la época dorada de Hollywood.
Pero Pocrid no para y el próximo lunes sacará su nueva colección de flamenca, que promete muchas sorpresas.
El creador cordobés también tiene claros sus referentes: «Mi gran ídolo es Gianni Versace por su capacidad para plasmar el poderío de las mujeres. No obstante, también admiro a diseñadores como Olivier Rousteing, de Balmain, Stéphane Rolland…», afirma.
En este camino ha contado con unas aliadas muy especiales: «Mis musas son las mujeres reales, de verdad, las que consumen lo que yo hago, mis clientas. Siempre que hago una colección pienso en ellas y en ideas factibles, que luego puedan salir a la calle, si perder de vista la creatividad», admite el diseñador.


Los colores de la tierra
Estilo bien distinto es el de Florencio Pérez. En su éxito hay mucho de trabajo, dedicación e inspiración bien localizada: «Lo que más me inspira son las obras de arte, ya sean en forma de arquitectura, pintura, música, cine o bandas sonoras de películas. En resumen, que sea algo que tenga una esencia que yo pueda investigar», asegura Pérez.
No obstante, en su día a día debe luchar por equilibrar su doble faceta profesional: «Hay poco en común entre los diseños que subo a la pasarela y los encargos que recibo. Y ahí es donde entra la lucha entre el artista y el empresario. El primero lo que quiere es desarrollar su creatividad y el empresario busca rentabilidad», admite.


Uno de los últimos en incorporarse a la cantera es Josué Selfa. Dice de sí mismo que recurre a «técnicas de costura tradicionales con una sensibilidad moderna, creando piezas únicas muy femeninas para una mujer contemporánea».
Sus maestros fueron Victorio & Lucchino ¿El resultado? «Un diseño tradicional y moderno, orgánico y arquitectónico, suntuoso y puro, donde domina el arte del volumen, el color y la silueta», en palabras del propio Selfa.
Recurre a técnicas artesanales y bordados complejos para conseguir una estética que dote de atemporalidad y elegancia al conjunto.


Deliciosas son también las creaciones de Mancini Costura: alta costura inspirada, en buena parte, en los diseños tan favorecedores de los años 50, que son una oda a la femineidad.
Tejidos ricos, ejecución perfecta y amor por los pequeños detalles, que los convierten en piezas de artesanía de manual.
Su día a día transcurre en la creación de patrones únicos y totalmente adaptados al cuerpo de sus clientas.
Otra de las especialidades de la maison cordobesa son los trajes de novia. Además, no sólo se encargan del diseño del vestido para el ‘gran día’, sino que ofrecen un asesoramiento integral en cuestiones de estilismo, maquillaje, peluquería y material audiovisual.
Rocío Górriz