REDACCIÓN – INSITU DIARIO
El Servicio Andaluz de Salud (SAS) ha distribuido entre su plantilla una circular en la que recuerda «la obligación que tienen de guardar secreto sobre cualquier información a la que accedan, en el ejercicio de su actividad profesional, relativa a pacientes afectados
por el coronavirus Covid-19, así como sobre aquellas materias que han sido reservadas, reglamentariamente, al ámbito del Ministerio de Sanidad».
Bajo el epígrafe «Prohibición de comunicar datos sobre pacientes de coronavirus Covid-19», el SAS repasa distintas normativas, desde la Constitución de 1978 a la Ley General de Sanidad que «recogen la relevancia de la intimidad de las personas y otorgan una especial protección a toda la información relacionada con su proceso y con su estancia en instituciones sanitarias públicas y privadas que colaboren con el sistema sanitario público».
En el documento, al que ha tenido acceso Insitu Diario, se destaca que «hasta tal punto ha llevado el ordenamiento jurídico a la protección de la intimidad de las personas, que ha establecido como ilícitos penales el descubrimiento y revelación de secretos, fijando como un tipo agravado el hecho de que la vulneración de la intimidad de la persona se produzca por un empleado público».
El escrito del SAS, firmado por el director gerente, apunta que la situación originada por el coronavirus, calificada por la OMS como pandemia internacional, «ha creado una crisis sanitaria sin precedentes en el siglo XXI y de enorme repercusión para la vida y el bienestar de los ciudadanos. A ello se unen la inmediatez con que se demanda la información y la celeridad en su transmisión, por el uso generalizado de las redes sociales».
Por último, recuerda que en la actual situación de estado de alarma se ha promulgado una orden sobre adopción de disposiciones y medidas de contención y remisión de información al Ministerio de Sanidad ante la situación de crisis sanitaria, «que reserva al Gobierno de la Nación la facultad de hacer pública la información epidemiológica, la relativa a la situación de la capacidad asistencial, la relacionada con las necesidades de recursos materiales y con los recursos humanos».