El cantante, ganador de un Grammy Award, que ha conquistado el mundo con sus notas de jazz soul, embelesó por primera vez en Córdoba al público del Teatro de la Axerquía con un espectáculo evocador y elegante. Regalando al público una secuencia de sus temas más conocidos, entre ellos Hey Laura y Liquid Spirit. Porter, con su envolvente voz, no defraudó. Desde luego superó las expectativas de este esperado 42º Festival de la Guitarra.
Con su timbre claro y barítono, el músico californiano se hizo querer por un público amplio y variado, gracias también a los ligeros matices pop que hacen más accesibles los sonidos más clásicos y de nicho del jazz/soul, normalmente apreciados por un círculo más reducido.




El ambiente romántico del Teatro de la Axerquía solo podía ser el telón de fondo de la primera canción del setlist: If Love is Overrated, pero la canción que iluminó, metafóricamente, el escenario, como bien explicó el artista unos minutos antes de la actuación, fue Take me to the Alley.
El público de diferentes nacionalidades y edades enloqueció con las notas de la apasionante Liquid Spirit, acompañando a los músicos al compás de sus manos, cada uno protagonista del escenario y, parte necesaria e imprescindible del grupo. Tivot Pennicott, por ejemplo, dejó que su saxofón hablara por sí solo, ofreciendo un número magistral. Porter puso el broche final al concierto con un homenaje a uno de los cantantes de jazz más importantes de todos los tiempos: Nat King Cole, con la canción Quizás, Quizás, Quizás versionada en Español.




Fotos: Insitu Diario