Los delegados de Desarrollo Educativo y Formación Profesional y de Empleo, Empresa y Trabajo Autónomo de la Junta en Córdoba, José Francisco Viso y María Dolores Gálvez, respectivamente, han renovado este martes un acuerdo que establece la colaboración entre el Servicio Andaluz de Empleo (SAE) y la Delegación de Educación para ofrecer orientación al alumnado que se encuentra en los últimos cursos de Educación Secundaria, Formación Profesional y Educación de Adultos.
Según informa la Junta en una nota, ambos delegados han destacado que el principal objetivo de este acuerdo es «mejorar la empleabilidad de los estudiantes cordobeses que están próximos a acceder al mercado laboral, estableciendo una continuidad entre la orientación que se ofrece en el ámbito educativo y la orientación dirigida a la inserción laboral».
Gálvez, que también es directora provincial del SAE, ha explicado que el acuerdo firmado este martes «supone la renovación de un protocolo de colaboración que ya venimos desarrollando y que recoge varias líneas de trabajo con el objetivo de establecer una continuidad entre la orientación que se ofrece en el ámbito educativo y el trabajo de apoyo a la inserción laboral que desarrolla el SAE».
Con este nuevo protocolo, ha continuado la responsable territorial, «introducimos las mejoras que nos aporta el nuevo Modelo de Gestión Integral del SAE con el Perfilado Estadístico como principal herramienta que permite tanto predecir el comportamiento del mercado de trabajo a corto y medio plazo, como tener información dinámica de hacia dónde se dirige el mercado de trabajo a nivel muy local, para conocer la demanda y oferta de empleo».
Asimismo, con este nuevo modelo «se podría realizar una prescripción del demandante de empleo que nos permite hacerle un itinerario personalizado de empleabilidad», ha recalcado la delegada.
Igualmente, ha incidido en que, además de en la ESO, FP o Educación de Adultos, «se trabajará preferentemente con alumnos matriculados en Programas de Transición para la Vida Adulta y Laboral (Ptval), que finalizan etapa educativa, presentan necesidades educativas especiales, proceden de un entorno social desfavorecido o en riesgo de abandono escolar temprano y que cursan estudios en los Centros de Educación Permanente».
Por su parte, el delegado de Educación, José Francisco Viso, ha destacado que con este acuerdo «son tres ya las diferentes colaboraciones que hemos desarrollado Empleo y Educación en diferentes materias, las dos primeras en el ámbito de formar en prevención de riesgos laborales en ciclos de primaria y en FP, y ahora con introducir la orientación laboral en las aulas para que el mundo académico y laboral vayan de la mano«. Viso ha declarado que esto demuestra «la importancia que la Junta de Andalucía da a dos ámbitos tan importantes como la educación y el empleo».
El responsable territorial ha hecho hincapié en la necesidad de fomentar la orientación laboral en edad temprana, «asesorar desde el principio para que nuestros alumnos tengan más perspectiva. Si confiamos en la FP y en los cambios que vienen en ella, tenemos necesariamente que aumentar esa perspectiva laboral».
Una comisión técnica de trabajo y seguimiento con representantes del SAE y Educación planifican las diversas actuaciones a realizar en el marco de este convenio. Entre ellas se encuentran la prevención del abandono prematuro de los estudios; el conocimiento del mercado laboral y de las oportunidades laborales que existen; la coordinación de la orientación profesional y laboral, y la difusión de servicios, recursos y programas; la participación en encuentros, ferias, talleres o seminarios que se organicen, entre otras.
Por parte de la Dirección Provincial del Servicio Andaluz de Empleo desarrollarán estas actuaciones el equipo de orientación propio del SAE en Córdoba, compuesto por 73 orientadores repartidos por toda la provincia, en las 28 oficinas de empleo.
Además de estas unidades de orientación, están las acogidas al programa Andalucía Orienta con 68 técnicos: 32 destinados a atender a personas desempleadas en general, 21 técnicos destinados a orientación de personas con algún tipo de discapacidad física o psíquica (9 técnicos en caso discapacidad física u orgánica, 9 en caso de personas con discapacidad intelectual o psíquica y 3 técnicos para discapacidad sensorial) y 15 para atender a personas desempleadas que se encuentren en riesgo de exclusión social.
Estas unidades prestan servicios de asesoramiento y acompañamiento intensivo en el proceso de búsqueda de empleo, a través de itinerarios personalizados de inserción (IPI).