REDACCIÓN-INSITU DIARIO
Se trata de uno de los grandes manjares de la gastronomía andaluza en general, pero es que además los cocineros cordobeses pueden presumir de haberle cogido el punto exacto a eso de freír boquerones, acedías, mero, merluza, chopitos o cazón. Son muchos los establecimientos que han convertido en santo y seña de su carta cualquiera de estos bocados crocantes, calentitos y jugosos con sabor a mar.
Legendarios son ya los boquerones al limón de Taberna Góngora (Calle Conde de Torres Cabrera, 4). Su único truco es poner pescado fresco, bien prieto, del día, magníficamente limpio y ligeramente sumergidos en zumo de limón.
Bien vale una visita a la Puerta de Almodóvar el bacalao frito, los boquerones vitorianos fritos, las gambitas cristal fritas con huevo y los calamares fritos con mahonesa de cítricos de Casa Rubio.
Al mismo grupo empresarial pertenece Casa Pepe de la Judería (Calle Romero, 1) ¡Tengan cuidado: su cazón en adobo resulta altamente adictivo!
Lo mismo ocurre con El Rincón de Paco (Calle de la Radio, 6), un establecimiento sencillo a espaldas de El Vial pero que aglutina una de las mejores selecciones de pescado y marisco fresco procedentes de las costas andaluzas.
De todos los puntos de la ciudad llegan cordobeses al barrio de Ciudad jardín dispuestos a darse un homenaje con las arañas fritas y los calamares de Taberna San Cristóbal (Calle Rodolfo Gil, 4)
Gran Bar, Bar Pataya y Porta Gayola, todos ellos del mismo grupo empresarial, ofrecen cartuchitos de bacalao, choco, calamares, pulpito y generosas raciones de pijotas.
En Taberna San Miguel Casa El Pisto (Plaza de San Miguel, 1) elaboran con mimo las pijotas, boquerones y bacalao sumergidos en un aceite caliente y limpísimo, que una vez que llegan al plato piden a gritos ser saboreados con cualquiera de los vinos de su selecta bodega.
Riquísimas son las gambas fritas con chanquetes de la huerta, el bacalao de La Tinaja (Paseo de la Ribera, 12) y sus ortiguillas fritas, un bocado tan rico como único.
Los fritos se han convertido también en dignos integrantes de la alta cocina. Un buen ejemplo es el bacalao ‘Chocobar’ frito en tempura, acompañado con patatas paja y nuestra deliciosa salsa ali oli que pone el chef Kisko García en su Choco Bar (Calle Compositor Serrano Lucena, 14)
En Taberna Damajuana (Calle Ronda de los Mártires, 2) resultan riquísimos los calamares fritos, japuta en adobo, bacalao y boquerones fritos.
En Bajo de Guía (Calle Conchita Cintrón, 2) fríen boquerones al limón, taquitos de bacalao, choco y calamar fino con auténtica maestría.
