Tras los últimos acontecimientos producidos, donde Eva Timoteo dejaba su cargo en el Ayuntamiento de Córdoba por duplicidad laboral, y después de largas negociaciones, María Luisa Gómez Calero se incorpora al grupo municipal Ciudadanos de manera independiente. La ya concejal en el Ayuntamiento de Córdoba se encargará de la delegación de Casco Histórico que hasta el momento dirigía Marián Aguilar.
El Alcalde de la ciudad, José María Bellido, se ha referido a Timoteo expresando que ha dado ejemplo de responsabilidad política dimitiendo y que lo que ha sucedido ha sido «un error administrativo».
«Garantizamos que el Gobierno del Cambio en Córdoba seguirá teniendo un Gobierno unido», ha proseguido el alcalde de Córdoba, el cual ha tenido que presentar durante su legislatura a tres concejales nuevos desde que comenzó su mandato.
Por su parte, la Segunda Teniente de Alcalde, Isabel Albás, ha comunicado que es un día importante ya que «el Ayuntamiento ha apostado por la estabilidad». «Gracias a María Luisa Gómez Calero seguimos haciendo unidad» ha señalado Albás.
María Luisa Gómez Calero ha señalado que en otras circunstancias «sería motivo de alegría» y advierte que se siente orgullosa de «haber podido llegar a un acuerdo para ser concejal en el Ayuntamiento de Córdoba«. Asiente que poder ayudar «a todas las pequeñas empresas significa gran satisfacción para mi».
Eva Timoteo, concejal de Servicios Sociales dimitió y dejó su puesto libre en el Ayuntamiento de Córdoba tras las múltiples acusaciones hecha por la oposición sobre su duplicidad laboral. Eva Contador tras la salida de Timoteo asumió Servicios Sociales, a la vez que mantenía la competencia de Mayores.
En la dimisión de Timoteo también opinaron los grupos municipales que se encuentran en la oposición, los representantes de Izquierda Unida y Podemos, Pedro García y Cristina Pedrajas, señalaron en una rueda de prensa que “el grupo de gobierno está tapando irregularidades en el caso Timoteo”.
La propia izquierda advirtió que Eva Timoteo, que entonces ejercía el cargo de concejal de Servicios Sociales había estado ejerciendo su actividad profesional habitual paralelamente a la que ejercía en el Ayuntamiento de Córdoba.
Ante esta noticia, la misma izquierda le pidió al alcalde de Córdoba, José María Bellido, que cesase de su cargo a la concejal y que le exigiese la devolución de su sueldo durante el año y medio en el que ha ejercicio su cargo en el Ayuntamiento de Córdoba.
Tras remarcar que el proyecto que tiene por delante es «apasionante y un reto muy difícil porque estamos en una situación muy complicada por la pandemia», Gómez Calero ha declarado que «detrás quedan muchas cosas«, pero «con el tiempo, la serenidad, la educación y cordialidad«, espera que «todo vaya fluyendo como debe ser en pro de la ciudad y siempre por el bien de los ciudadanos».
Entre los primeros retos que se marca, Gómez Calero ha establecido ponerse al día con el plan especial del casco histórico, enterarse de «toda la normativa y circunstancias y el punto exacto» en el que se encuentra.
De igual modo, ha aseverado que le preocupa «mucho» la situación de los comerciantes y los pequeños autónomos de la zona y ante ello espera «poder aportar como Ayuntamiento lo que haga falta para subsanar lo antes posible la situación», a la vez que ha destacado «el atractivo» que supone el casco, de ahí que se vaya a centrar en «cuidar y tenerlo en condiciones para la máxima convivencia de los vecinos y los visitantes».
Gómez Calero fue gerente del Imdeco y dimitió hace un año tras advertir de las «presiones» que entendía estar sufriendo por parte del presidente del organismo, Manuel Torrejimeno (Cs), a la vez que señaló que si llegara el momento de que se produjera alguna baja en Cs, que la expulsó como militante, en el Ayuntamiento, renunciaría al acta, «para que no quede duda de que no quiero el sillón», apostilló. No obstante, tomará el acta como concejal en el Pleno.
Al hilo, ha dicho que es verdad que dijo las mencionadas palabras sobre la renuncia al acta «en su momento», de modo que «si se hubiese producido un movimiento hace un año, hubiera habido otra situación probablemente distinta», pero «estamos hablando de un año después y el contexto y las circunstancias son totalmente distintas y la decisión al final ha sido distinta», ha apostillado, para aclarar que eso lo dijo «en un momento determinado, con unas circunstancias muy específicas».
Laura Martín