Aprovechar el cementerio como espacio cultural y cerrar el capítulo de la Guerra Civil para descansar en paz. María Luisa Gómez Calero, presidenta de Cecosam, asegura tener muy claros los siguientes pasos a dar en la línea estratégica, manteniendo la sensibilidad por la que los cementerios de Córdoba fueron alabados a nivel nacional durante la pandemia. La que fue gerente del Instituto Municipal de Deportes (Imdeco) busca ahora revolucionar la gestión de los camposantos y hacerlos más sostenibles y agradables con el entorno. Insitu Diario entrevista a Gómez Calero para conocer de primera mano hacia dónde se dirige la gestión de Cecosam y sus trabajadores, cuál es el futuro de los cementerios de la capital cordobesa y garantizar que se cumple con la Memoria Histórica, entre otros temas.
Pregunta. Viniendo del mundo del deporte ¿cómo se siente en su actual cargo?
Respuesta. Son dos mundos tan diferentes… Pero bueno, vengo del mundo de la gestión, en ese caso deportiva. Aquí también estamos gestionando. Es una gestión de servicios muy diferentes, pero muy importantes que se le dan a la ciudadanía y estoy encantada de estar prestando este servicio público.
P. ¿Cree que los cementerios son uno de los tesoros ocultos de Córdoba?
R. Pues sí, la verdad que sí. De hecho lo he descubierto en primera persona porque, como me ha pasado a mí, le puede pasar a muchísimos de los cordobeses. [El cementerio] no era un sitio el cual lo tuviéramos dentro de algún tipo de iniciativa cultural que ofrecer. La función de los cementerios es la que es y lo tenemos para ese momento y ya está. Durante estos meses he descubierto que son espacios donde aprender muchísimo sobre el pasado de nuestra ciudad, puedes contemplar esculturas que merecen mucho la pena y creo que son espacios que podrían estar más aprovechados de manera cultural. Y en ello estaremos.
P. ¿Cómo era la situación que se encontró cuando llegó a la presidencia de Cecosam?
R. Cuando llegué en diciembre me encontré con que desde Cecosam y desde el principio de este mandato se había diseñado un plan. Cuando me lo explicaron le vi bastante sentido y, de hecho. lo he continuado. Sobre todo, lo he tenido que impulsar. Eso sí, he visto que hacía falta un poco de impulso, pero el plan estaba bastante bien diseñado. Había que trabajar sobre la eficiencia y la eficacia del servicio que se presta, la mejora de las instalaciones y el aprovechamiento cultural de los espacios. Es donde observé que menos se estaba trabajando.
El plan lo he respaldado, le he hecho mío y lo he impulsado para garantizar que los servicios, la mejora en la eficacia y en los procedimientos se culminen antes de la finalización del mandato. Sobre todo, empezar a meter la parte cultural para que se quede bien asentada de aquí a un futuro.
P. El sistema ERP llevaba 10 años sin actualizarse, ¿qué se ha hecho al respecto?
R. El ERP es un sistema informático de gestión que estaba muy obsoleto. A finales de año se presenta el nuevo sistema y eso nos va a revolucionar la forma de trabajar. Quienes lo van a notar son los usuarios porque van a acceder a expedientes muy antiguos de manera muy fácil y nosotros vamos a trabajar con fluidez. La comunicación va a ser mucho más fácil. Además, vamos a montarnos en el carro de la actualización, no podemos estar con sistemas anticuados.
A nivel de gestión pura y dura y como se encuentra la empresa financieramente, hemos hecho un trabajo bastante intenso con el sistema contable y financiero de Cecosam, adecuándolo a los requisitos que llevaban desde 2016 indicando desde la intervención general del Ayuntamiento. Es un salto cualitativo e interno, pero a la larga repercutirá también a los usuarios.
P. ¿Cómo hacen para llegar hasta el ciudadano?
R. El plan de comunicación viene diseñado por el servicio de viabilidad que estamos esperando para que nos lo entregue y que están elaborando desde la Universidad de Loyola. Eso nos marcará unas líneas estratégicas para trabajar durante los próximos diez años. Una de estas líneas fundamentales es precisamente el plan de comunicación. Estamos trabajando en nuevos productos porque la sociedad va demandando una serie de servicios. Estamos adaptando las instalaciones a esos servicios que demandan. Hay que hacer un buen plan de comunicación para que los usuarios tengan muy claro lo que realmente quieren para ese momento tan especial. Sobre el plan de viabilidad, es la primera vez que se hace de manera tan contundente en Cecosam y creo que servirá mucho para poder trazar, no solo a corto plazo y lo más inmediato, sino que vayamos hacia un punto en concreto.
P. Durante la pandemia, Cecosam fue alabado a nivel nacional. ¿Qué hicieron a diferencia de otros cementerios de España?
R. Te agradezco la pregunta porque me gustaría felicitar a todo el equipo de personas que trabajan en Cecosam porque hicieron una labor encomiable en un momento tan delicado donde teníamos tanto miedo. Respecto a la pregunta, lo que nos hizo diferentes fue intentar pensar en las personas que no podían despedir a sus seres queridos. Justo en el momento del confinamiento solo podían acceder tres familiares, pero, cuando empezó a suavizarse el confinamiento en mayo y en adelante, permitimos a 200 familias, que tuvieron que despedirse de sus seres queridos de una forma tan dolorosa, que hicieran algún tipo de acto de sepelio en donde descansaban los restos de sus familiares.
«Durante la pandemia, lo que nos hizo diferentes fue pensar en las personas que no podían despedir a sus seres queridos»
Por otro lado, fuimos los únicos que pudimos celebrar la festividad de los Santos de una forma más o menos cercana a lo que se venía haciendo: Abrimos los cementerios y, a través de cita previa, pudieron visitar los cementerios unas 20.000 personas. Para las cifras y los momentos en los que estábamos fue bastante numeroso. Eso fue un esfuerzo del personal para estar a la altura y pensar en las personas que necesitaban dar una despedida lo más decente posible y más cercana. Fue muy alabada y gracias desde luego al personal de Cecosam.
Familia en el cementerio de San Rafael Foto: RAM
P. ¿Cómo está respondiendo la población a las actividades culturales propuestas dentro de los cementerios?
R. Hay parte de la población a la que le puede causar cierto reparo o rechazo en algún momento, pero, la población que opta por la oferta cultural, lo hace con mucho respeto, las personas saben perfectamente en qué sitio estamos. Hay una gran sensibilidad. Estamos cubriendo un hueco de personas que sí le interesa este tipo de actividades culturales que hacían falta y, repito, con el que se hacen con el máximo respeto. Muestra de ello, hace unas se manas ofrecimos un concierto en el cementerio de San Rafael. Para mí fue impresionante ver la acogida que tuvo por el público. Es una forma más de ver la apertura de los cementerios con otro tipo de actividad que no sea para la que está diseñada, que es el sepelio de los difuntos.
P. ¿Cómo se puede embellecer y mejorar el atractivo de los camposantos?
R. La forma de embellecer y adecentar el cementerio, tal y como comentaba con el personal de Cecosam y una vez conocí todas las instalaciones, era muy claro: El verde y la naturaleza tenía que estar también presente. Es por eso que de ahí hemos hecho un convenio con el Imgema, Jardín Botánico, para tener asesoramiento e implantar vegetación que sea sostenible, que no necesite mucho mantenimiento, pero que establezca un entorno más amable, agradable y con ello contribuir a la sostenibilidad de los cementerios.
P. La Memoria Histórica preocupa a gran parte de la población, ¿en qué punto se encuentra la búsqueda y exhumación de las víctimas de la Guerra Civil?
R. No todo es la historia reciente, también había una deuda: cerrar el capítulo de la Guerra Civil. Desde este equipo de gobierno hemos tenido mucho respeto con la cuestión de la Memoria Histórica. Tuve la oportunidad de conocer a Antonio Deza, presidente de asociación Dejadnos Llorar. Es un tema muy sensible y hay que trabajar para cerrar el capítulo y que todos los familiares tengan a sus difuntos ubicados y en paz para poder continuar hacia delante. Desde Cecosam hemos colaborado desde el principio impulsando la Memoria Histórica, incluso con la financiación de 30.000 euros de nuestras arcas propias, gracias a los cuales se ha encontrado la fosa más grande, la de la Salud. Para nosotros es un trabajo muy importante. La Memoria no recae en Cesosam, sino en el área de Infraestructuras, pero desde luego nosotros mantenemos nuestra colaboración al 100%, es un tema que tratamos con la mayor dignidad para todas las personas y estaremos siempre.
«Hay que cerrar el capítulo de la Guerra Civil y que todos los familiares tengan a sus difuntos ubicados y en paz para poder continuar hacia delante»
P. ¿Se han llevado a cabo cambios con respecto a los trabajadores?
R. Se están implementando cambios respecto al trabajo. Hay que dotar de herramientas para que el trabajo sea más eficaz. Todo el proceso de digitalización de los procesos internos y la norma ISO son cambios que experimentan nuestros trabajadores. Lo más importante es que no hemos perdido ninguna plaza, no hemos amortizado ningún puesto de trabajo, sino que hemos garantizado y sacado siete plazas de distintas categorías profesionales. No podíamos mermar más la plantilla. Veníamos de una anterior legislatura donde se perdieron seis plazas y no podíamos permitirnos el lujo de perder más personal. Son instalaciones muy importantes, damos un servicio que es esencial para la ciudadania. Así pues, el objetivo número uno era conservar la plantilla y garantizar esa conservación con la oferta pública de nuevas plazas y, segundo, dotar de mecanismos que les ayuden a tener mayor eficiencia y, también, de herramientas para que el trabajo lo hagan con mayor facilidad.
P. ¿Qué queda por hacer? ¿Hacia dónde se dirigen los cementerios de Córdoba?
R. Tenemos un reto importante, todo lo que estamos diseñando y preparando, una vez que lo tengamos, ponerlo en marcha. Siempre se tarda un tiempo en analizar, diagnosticar y escoger las estrategias. El «qué» es muy importante para mí, el dar continuidad a todo el trabajo que se esta realizando. El ver el día a día y retroalimentarnos con los sistemas de procesos que estamos estableciendo, tanto el de ERP como el de calidad ISO, darán información continua de mejora. Tendremos que implantar esas mejoras, detectarlas y ponerlas en marcha. Eso con respecto al funcionamiento, porque lo que esta claro es que el servicio que damos tiene que ser el de mayor calidad. Además, quiero resaltar el esfuerzo que hace el personal de Cecosam, porque esta a la altura. La sensibilidad es nuestra premisa y hay que continuar con ella. También la parte de sostenibilidad, todas las inversiones, el ser energéticamente autosuficientes y el embellecimiento, a través de la gestión de los jardines y la imagen que tengan los cementerios, será un pilar importante. El tercero y último, afianzarlos como otro espacio alternativo de cultura. Son tres retos bastante apasionantes.
Javier Sánchez
Foto y vídeo: RAM