Un estudio ha señalado que llevar gafas reduce la probabilidad de contagiarse de la covid-19. De hecho, afirman que la probabilidad de contraer el virus es hasta tres veces menor que la de una persona que no porta este utensilio, que incluso en este siglo se ha catalogado como un artículo de moda.
Unos investigadores de la india han sido los creadores de este estudio según una publicación en El diario Thegraph. La explicación podría ser lógica, puesto que sí llevas mascarilla y gafas las posibilidad del contacto de las manos o exposición al virus con la cara, la nariz y los ojos es menor que si no las usas. Siendo estas las vías principales de contagio de la Covid-19.
Este estudio ha afirmado que la probabilidad de contagiarse de coronavirus con gafas y mascarilla es hasta tres veces menor. Desde que comenzó la pandemia las mascarillas son obligatorias en España para salir a la calle. Pero también, se han propuesto otros artilugios como las gafas o pantallas de plástico que decían que protegían del virus y que se han quedado en el olvido con el paso del tiempo para la persona de a pie. Aunque médicos y enfermeros aún siguen haciendo uso de las conocidas como pantallas protectoras.


Este estudio afirma que tras analizar a 304 personas en un hospital en el norte de la india. En un periodo comprendido entre el 26 de agosto y el ocho de septiembre, y con una edad entre diez y 80 años, todos con síntomas de Covid-19 y haciendo un balance previo, de que “Un individuo tiene el hábito de tocarse la cara en promedio 23 veces en una hora y sus ojos en promedio tres veces por hora”, han concluido que aquellas personas que tienen gafas no pueden tocarse tanto la cara y por tanto la probabilidad es menor.
En la actualidad según el Instituto Nacional de estadística, (INE) más de la mitad de la población española usa gafas, concretamente un 59,40% de la población tiene un problema ocular y hace uso de los lentes de contacto. Por otra parte, la Organización Mundial de la Salud, (OMS), señala que la COVID-19 es una enfermedad causada por el virus SARS-CoV-2, que se propaga entre las personas principalmente cuando una persona infectada está en contacto cercano con otra persona.
La OMS expone que la forma de propagación es a través de pequeñas partículas líquidas expulsadas por una persona infectada a través de la boca o la nariz al toser, estornudar, hablar, cantar o resoplar. Aunque afirma también, que otras personas pueden contraer la COVID-19 cuando el virus entra por la boca, la nariz o los ojos, algo que puede ocurrir con mayor probabilidad si las personas están en contacto directo o cercano (menos de 1 metro de distancia) con una persona infectada.
El estudio de investigadores indios concluye con que “Tocarse y frotarse los ojos con las manos contaminadas puede ser una vía importante de infección” y añade que “el uso prolongado de gafas puede evitar que los ojos se toquen y froten repetidamente”.